Hay cierta necesidad de control que se esconde tras la teoría del fin del mundo y también otras situaciones más cuotidianas. La idea de este post vino a mi mente cuando me di cuenta de que aun habiendo pasado la fecha que pronosticaba Nostradamus, todavía hay personas que defienden que él estaba equivocado y que el final tiene nueva fecha y que está por venir.
Pero ya no es solo una cuestión de teorías catastrofistas, indagando sobre el asunto, la relación con los padres u otras personas de nuestro círculo, la vida laboral y en resumen, todo lo que concierne nuestra vida, está total y básicamente sumida en nuestra percepción de creer que manejamos (o no) las cosas, y la importancia de que sea así.
El origen de la Necesidad de Control
Según Alfredo García y Guillermo Velázquez, dos expertos en psicología, la necesidad de control subyace en nuestro subconsciente desde el principio de los milenios. Nos dimos cuenta, como raza racional, que tenemos un poder muy grande, nuestro cerebro, que tiene la capacidad de anticipar sucesos.
A pesar de que no posee la garantía del 100 por 100 de aciertos, vimos que si sometíamos a nuestro control las circunstancias de nuestro entorno, seríamos capaces de prosperar bajo nuestros deseos.
Ya se tratase de la descendencia, la seguridad material, la salud, la situación geográfica, etc. pudimos ver que manejando “los hilos” nos sentíamos seguros de que nuestra vida (y, a veces la de otros) estaba bajo nuestra merced, y no al contrario.
Toda esta situación generó que con el tiempo, cuando algo no sucede como esperamos, se deba a algo malo que peligrara nuestra estabilidad. Provoca que nuestras alarmas internas salten, griten y generen ansiedad y bloqueos debido a esta nueva necesidad de control que hemos alimentado con los milenios.
La Necesidad de Control que genera paranoias
Dado que no todo en el mundo puede ser fácilmente manejado, o bien, no todo nos ofrece la suficiente información como para satisfacer esta necesidad de control que tenemos, nos obsesionamos porque no soportamos la incertidumbre. Por lo que cuando nos encontramos con ésta, rellenamos el vacío de información con fantasías ya sean negativas o positivas, las paranoias. Y cuando no nos encontramos con nuestras expectativas de frente, nos genera frustración.
Pero hay diferencias entre paranoia y ansiedad. La ansiedad surge del miedo a sufrir, pero la paranoia surge de una convicción de desastre. La paranoia es una falta de objetividad sensibilizado por una experiencia traumática, es una confianza frente al miedo, creer que puedes resolver el problema vs el problema superándote a ti.
Habrá muchos momentos en tu vida que generen incertidumbre, más allá de las grandes cuestiones de la existencia. Por ejemplo, quedarte atrapado en una habitación, tirado en medio de la carretera sin gasolina, no recibir ingresos durante meses… ¿Te has preguntado cómo te has sentido al final del problema? Verás que no se ha acabado el mundo (de nuevo), no han demacrado a toda una población, ni tampoco ha estallado una guerra. Nada remotamente destructivo y devastador que pudiera culpabilizarte.
Aun así, tu necesidad de controlar absolutamente todos los aspectos que te envuelven y la ansiedad que se genera debido a ese miedo a la incertidumbre respecto a lo que significas tú en este mundo y lo que significa la vida para ti, es la responsable de tus paranoias. ¿Qué puedes hacer en esos casos?
La Necesidad de Control del Tiempo
Vivir el presente. Lo digo como respuesta a la anterior pregunta y a lo que comento a continuación. Y no lo digo yo, lo dice la gente con una mente sana, estudiosa o sabia.
En un principio hemos dicho que nuestra mente es una herramienta tan afinada que hasta permite prever situaciones que no han sucedido. Como consecuencia, normalmente no vivimos, soñamos.
Estamos permanentemente en el pasado o en el futuro, rellenando huecos de información y reorganizando pensamientos que al final, en exceso, causan ansiedad y/o depresión. La verdad que para mí el mayor problema de esto no es que sea malo tener tal capacidad, si no el no saber gestionarla de manera que no suponga una alteración emocional tan variable. En pocas palabras, somos seres emocionales a pesar de considerarnos una raza racional.
Sabiendo esto, ¿por qué la sociedad de hoy nos hace vivir en el pasado con culpa por no saber siempre cómo aprovechar bien el tiempo, y con angustia por creer que el tiempo se acaba?
Y es en parte debido al enfoque sobre nuestra planificación, respecto a las metas que tratamos de conseguir en nuestra vida, la importancia que le damos a los objetivos cumplidos.
Hagas lo que hagas habítalo de consciencia para poder vivir el presente. Esto te da una tregua con la muerte, un entrenamiento mental, vivir cada momento garantiza no temer al fin del tiempo.
De hecho, cuanto menos cúmulo de situaciones sientas pendientes en tu día a día, más paciente será tu mente, más pacífica. Si sientes que no te da la vida para vivirla, nunca la vivirás puesto que vivir con estrés y agonía perjudica la calidad de tu existencia.
Lo que realmente esconde la necesidad de control
¿Tienes algún padre o madre sobreprotector/a?, ¿has tenido una relación de pareja tóxica que creía tener potestad sobre tu forma de vestir o disfrutar de otras compañías?
Por cierto, esta pregunta me recuerda que de ser así, te recomiendo que entres en alguno de los siguientes enlaces
MIEDO AL ABANDONO. Resume bien lo que esconde toda esta necesidad de control desmedida.
Puede que, en un principio, cuando somos pequeños nuestros padres deban ejercer un papel jerárquico, pero eso cambia cuando nos volvemos adultos y su función está cumplida. No todos reconocen este hecho, debido a que perder la autoridad supone para algunos de ellos verse reducidos, como si su ego estuviera en juego, y el sentimiento de abandono que sucede del vínculo crea angustia.
Al no ser conscientes de este hecho, ya que por desgracia suele ser subconsciente, creen que pueden manejar la situación controlando cosas que poco o nada tienen que ver. Es decir, ¿Qué llegues antes a casa o apruebes tus exámenes de universidad, significa que vas a respetar o querer más a tus padres? Por supuesto que no, pero al creer que dominan ciertas situaciones, ocultan el miedo atroz que supone la pérdida. Y lo mismo pasa con amantes que tienen problemas sin resolver.
La necesidad de control, te controla
Todo está relacionado, si lo piensas. Así que para abreviar. Diría que, si te desesperas, como me pasa a mí y a todo el mundo al ver que algo “se te escapa” porque finalmente eres plenamente consciente de que nunca estuvo a tu merced…
Respira profundo, sé consciente de que el mundo no se acaba, que nuevas etapas proceden, y que el minuto exacto que realmente importa es el que vives en este preciso instante.
No te preocupes si no cumples las expectativas impuestas y/o autogeneradas. Simplemente vive.
Lo sé, es más fácil decirlo que hacerlo. Pero hay algo que es incuestionable, y es que las personas hacemos lo imposible por sobrevivir, por lo que vivir mejor es solo algo que nada más hay que proponerse.
En fin, si te ha gustado este post te recomiendo muy mucho que te suscribas al canal de Youtube de Blázquez y Gárate Gabinete de Psicología. Trata temas super interesantes 🙂
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